Gracias a la buena presencia de Amaradás (el servidor del absoluto) y de Premalata (amor que se expande hasta llenar el universo) me encontré con el espíritu de Leonardo Da Vinci. Y no podré dormir hoy. Me temo que no dormiré en lo que me reste de vida. Júzguese:
"Plato para los que sufren de peste:
Cualquier plato que se ofrezca, en buena hora, a una persona apestada puede ser su última comida: y, por lo tanto, mientras algunos dirán que nada desperdiciéis en ellos, yo recomiendo que la comida sea de la mejor calidad. Os aconsejo que salgaís a atrapar con vuestro lazo y que le ofrezcáis muslo de colimbo hervido, con un poco de nabo amasado; pues plato mejor que éste, como antes he escrito, no lo hay. Esto, o un plato de nudillos mezclados (pero después aún debéis destruir el cuenco del que haya comido)"
Leonardo Da Vinci
2 comentarios:
Bueno yo me preparé una sopa de homgos buenisima, asi que un día si veo un apestado le daré a probar.
Chale.
Se me hizo la boca chicharrón.
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